Si para ciertas parejas una infidelidad es una ofensa imperdonable, para otras puede ser la oportunidad para revivir el romance en la relación. Por eso no existe una regla universal para condenar a los infieles. Sin embargo, una encuesta hecha a 10.000 estadounidenses, publicada en la revista Playboy, pretende dar a conocer cómo reaccionaría una persona a una infidelidad. La encuesta muestra que la generación más tolerante a cualquier engaño —empezando por una mentira— son los baby boomers (85 %), es decir, aquellos entre los 55 y 70 años. Les siguen los de la generación X (79 %), que tienen entre 37 y 55 años; y, luego, los millennials (74 %), que tienen entre 22 y 36 años. A estos últimos no les queda tan fácil hacer borrón y cuenta nueva. Por otro lado, las mujeres son quienes perdonan una infidelidad con más facilidad: el 71 % perdonó alguna vez a su compañero por un engaño, frente al 57 % de los hombres. Lo curioso es que el 44 % de las mujeres y el 33 % de los hombres fueron más allá y les dieron una nueva oportunidad a sus parejas después de un segundo engaño. Aún más sorprendente es que el 71 % de las personas cree que los infieles pueden cambiar. Pero según una investigación de la Universidad de Denver, las personas que han engañado en una relación pasada son tres veces más propensas a recaer.
Por MSN 
¿UNA VEZ INFIEL, SIEMPRE INFIEL?
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